Una ducha es capaz de ofrecer múltiples beneficios para la salud. Aunque a diario le damos valor a bañarnos netamente por un asunto de higiene, el acto de meterse al baño es una acción que permite aliviar el cuerpo, favorece la relajación de los músculos, y es perfecta para recuperar un poco de fuerzas tras un día intenso en el trabajo. Lo más común es que nos duchemos a diario. Y en función de la persona lo puede hacer una, dos y hasta tres veces. Pero, ¿qué es lo mejor en todo esto según los expertos?
7¿Cómo es la ducha perfecta?
Los especialistas destacan que también es esencial saber darse la ducha. Porque no es solamente meterse al baño y asearse. Sino que, han de haber técnicas específicas para que ese hábito sea positivo. Por ejemplo, debes ducharte haciendo masajes por las zonas de tu cuerpo utilizando las manos.
Las esponjas suelen ser demasiado agresivas para la piel, así que intenta tenerlas alejadas de ti. De igual manera, la recomendación es que recurras al agua tibia. Es perfecta para bañarse y quedar a gusto.