Una de las tradiciones de la Semana Santa y que a los niños les encanta es la del huevo de Pascua; y aunque parezca contradictorio, algunos no necesariamente tienen forma de huevo. También vienen con forma de conejo de pascua o de gallinas; pero eso sí, siempre son de chocolate. Aunque muchos optan por comprarlos, nada más divertido que pasar la tarde elaborando tus propios huevos de pascua.
Para la preparación de estos huevos de pascua, debes usar un buen chocolate de cobertura que sea de calidad para que puedas obtener unos resultados óptimos, ya que te quedarán con un acabado profesional. Además, recuerda que puedes utilizar los moldes apropiados que tengan las formas de tu preferencia.
6Cristalización del chocolate
Cuando el chocolate haya bajado unos 4 o 5 °C de temperatura, esto se debe a la cristalización del chocolate, lo que se consigue al dejarlo caer de la espátula al mármol. Gracias a esto, se formará un pico; esa es una forma de saber que ya bajó a la temperatura deseada.
Vierte el chocolate que está sobre el mármol en el tercio de chocolate que se reservó en el bol y mézclalos para que tomen la misma temperatura. Debe quedar una mezcla homogénea y con la misma temperatura y consistencia.