Hay múltiples factores que puede hacer que tu papada resalte, bien sea por la edad, por el incremento de peso, por mal posicionamiento corporal, incluso hasta por adelgazar, o pueda ser que simplemente así sea tu fisonomía, con una papada ampliada, y puede ser que eso te preocupe a la hora de definir tu imagen.
El mejor consejo que podemos darte, antes de que se presenten inconvenientes con tu papada, es que la cuides, teniendo especial atención a esa área de rostro desde una edad muy temprana, teniendo una rutina de hábitos de cuidado diario que pueden resultar muy beneficiosas para el futuro, lo que va a redundar en que tengas una mejor calidad de vida.
8Exfoliación y Peeling
Un tratamiento que ha resultado eficaz para luchas contra la flacidez en el cuello y poder lograr que se reduzca el tamaño de la papada es someternos a tratamientos de exfoliación y peeling, que además nos ayudarán a proteger la piel. Lo recomendable es que los realicemos una vez a la semana en principio, para luego poder espaciarlos por lapsos más prolongados.
Una exfoliación y peeling logrará la regeneración de nuestra piel y deshacernos de las células muertas, una cuestión que necesitará todo nuestro rostro, incluyendo la papada, que será el objetivo principal de estos tratamientos.