Hay múltiples factores que puede hacer que tu papada resalte, bien sea por la edad, por el incremento de peso, por mal posicionamiento corporal, incluso hasta por adelgazar, o pueda ser que simplemente así sea tu fisonomía, con una papada ampliada, y puede ser que eso te preocupe a la hora de definir tu imagen.
El mejor consejo que podemos darte, antes de que se presenten inconvenientes con tu papada, es que la cuides, teniendo especial atención a esa área de rostro desde una edad muy temprana, teniendo una rutina de hábitos de cuidado diario que pueden resultar muy beneficiosas para el futuro, lo que va a redundar en que tengas una mejor calidad de vida.
6Usar cremas para la cara
Existen cremas que han sido especialmente creadas para esa zona del cuello y la papada, ya que requieren de vitaminas y nutrientes especiales para conservar su humedad y su lozanía, evitando la aparición de arrugas y con un efecto tonificador de la piel.
Se deben aplicar de manera diaria en esa zona, como si fuera un tratamiento, pero ello por sí sólo no garantiza el éxito deseado, sino que debe ser combinado con otras técnicas de ayuda y prevención, como la de hacer los ejercicios del cuello que te hemos recomendado.