La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Palma acoge este viernes la vista previa a seis acusados, tres hombres y tres mujeres, de pertenecer a un grupo organizado cuya finalidad era la explotación sexual de mujeres procedentes de Bulgaria, contando para ello con un establecimiento donde se ejercían las actividades de alterne y prostitución. La Fiscalía pide para ellos penas que suman hasta 63 años de cárcel y 50.400 euros en concepto de multa.
Según el escrito del fiscal, cada uno de los miembros desempeñaba tareas concretas, consistentes en la captación de mujeres en el país de origen, traslado a España con la finalidad de obligarlas a ejercer la prostitución, recogida a su llegada al país, alojamiento en pisos ocupados por los acusados, gestión de clubes donde ejercer la prostitución, control de las ganancias obtenidas y vigilancia e intimidación constante de las víctimas para impedir que escaparan.
Asimismo, la Fiscalía asegura que todos los componentes actuaban con perfecto conocimiento de la situación de vulnerabilidad en la que se encontraban las mujeres durante el tiempo que fueron explotadas sexualmente. En total, el Ministerio Público contabiliza dos víctimas, que fueron trasladadas desde Bulgaria a Mallorca.
Estos hechos, asegura el escrito, son constitutivos de un delito de asociación ilícita de promoción del ejercicio de la prostitución realizado mediante intimidación y aprovechándose de la vulnerabilidad de las víctimas con lucro obtenido explotando la prostitución de otra persona. Asimismo, el fiscal contempla también dos delitos relativos a la prostitución y otros dos de detención ilegal.
Por todo ello, pide para los acusados distintas penas que suman un total de 63 años de cárcel y multas de hasta 50.400 euros.