Juana Rivas, «muy contenta» con la suspensión de la pena porque «podrá ver a sus hijos también en Italia»

Juana Rivas ha recibido «muy contenta» la decisión de la Audiencia de Granada de suspenderle la pena de prisión, tras el indulto parcial que le concedió el Gobierno, porque ya no tendrá «ninguna limitación para poder viajar a Italia y ver a sus dos hijos cuando quiera», según ha señalado a los medios su abogado, Carlos Aránguez.

Juana Rivas está cumpliendo pena en su domicilio con un brazalete de control telemático desde finales del pasado diciembre y aún le queda aproximadamente medio año de condena. Su defensa augura que este dispositivo le será retirado «en breve» tras la decisión de la Audiencia de Granada de suspenderle la pena de prisión. Esta medida le ha sido concedida con la condición de que no cometa un nuevo delito durante el plazo de tres años y de que participe en programas de parentalidad positiva, tal y como ha solicitado la acusación particular, ejercida por la expareja de Juana Rivas y padre de los menores.

El letrado Carlos Aránguez ha trasladado un breve comunicado a los medios en el que considera «muy positivo que se rectifique la injusta decisión» del titular del Juzgado de lo Penal 1 de Granada, Manuel Piñar, al que ha acusado de haber «tratado siempre a Juana Rivas con absoluta falta de parcialidad».

Aránguez afirma que Juana Rivas se encuentra «muy contenta porque podrá ver a sus hijos también en Italia cuando quiera» pues una vez se le retire el dispositivo «ya no tendría ninguna limitación para poder viajar a Italia», donde residen los pequeños junto a su padre, y poder estar con ellos sin que tengan que venir a España.

PERIPLO JUDICIAL

La resolución de la Audiencia de Granada, que es firme, pone fin a un periplo judicial iniciado desde que el 27 de julio de 2018 el Juzgado de lo Penal 1 de Granada condenara a Juana Rivas a cinco años de prisión como autora de dos delitos de sustracción de menores después de que permaneciera un mes en paradero desconocido con sus dos hijos incumpliendo las resoluciones judiciales que le obligaban a entregarlos al padre, el italiano Francesco Arcuri, al que acusaba de malos tratos; extremo que él siempre ha negado.

El magistrado también condenó a esta madre de Maracena (Granada) a ser privada de ejercer la patria potestad sobre los niños, en una sentencia que unos meses después –en marzo de 2019– confirmó la Audiencia Provincial de Granada en todos sus extremos, salvo en lo relativo a la indemnización que debía abonarle a su expareja por daño moral, que rebajó de los 30.000 a los 12.000 euros.

El asunto volvió a ser recurrido por la defensa de Rivas y llegó al Tribunal Supremo que, a finales de abril de 2021, acordó rebajar a la mitad la pena de prisión al considerar que, aunque fueron dos los menores sustraídos, cometió un único delito y no dos.

El 16 de noviembre de 2021 el Consejo de Ministros aprobó el indulto parcial para Juana Rivas en consonancia con la postura de la Fiscalía y dos semanas después de que el Pleno de la Sala Segunda del Tribunal Supremo (TS) enviara un informe al Gobierno sobre la postura de sus magistrados en torno a esta decisión. El Supremo reconoció que existía división en esta materia; y es que ocho de sus magistrados apoyaron el indulto parcial para Rivas y otros ocho, entre los que se incluyó el presidente de la Sala, Manuel Marchena, se oponían.

Ahora el italiano Francesco Arcuri, padre de los hijos de Juana Rivas, ha solicitado al Tribunal Supremo que anule el indulto concedido a su expareja al entender que fue arbitrario porque se adoptó «a pesar de las irregularidades manifiestas del expediente» y toda vez que se concedió de forma «exprés».