El Consejo de Ministros ha aprobado este martes el Plan Nacional de Ciberseguridad que, finalmente, estará dotado con una inversión de más de 1.200 millones de euros, frente a los 1.000 millones anunciados previamente, según ha explicado en rueda de prensa la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño.
Calviño ha destacado la importancia de aplicar este plan para poder «responder de manera adecuada al mayor riesgo geopolítico actual».
En paralelo al Plan Nacional de Ciberseguridad, el Gobierno ha aprobado un Real Decreto de Ciberseguridad 5G, que transpone la ‘caja de herramientas’ en este campo de la Comisión Europea y que busca acelerar el despliegue seguro del 5G en el país.
La aprobación de la ley de ciberseguridad 5G estaba prevista por el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia para el segundo semestre, sin embargo la invasión rusa de Ucrania ha acelerado los trámites y la directiva ha sido aprobada vía decreto, aunque podrá tramitarse luego como proyecto de ley en caso de aprobarlo el Congreso.
El anteproyecto incluía una lista calificación de riesgos de proveedores según su nivel de seguridad y establecía los controles que los operadores deben hacer en sus redes y cadena de suministros.
Asimismo, el nuevo plan de ciberseguridad también incluye la puesta en marca del centro de operaciones de ciberseguridad de la Administración General del Estado (AGE), que fue adjudicado en febrero a Indra y Telefónica.
El Gobierno ya publicó en 2019 una Estrategia Nacional de Ciberseguridad, cuyos compromisos fueron recogidos también en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, con reformas como la ley de ciberseguridad 5G e inversiones por más de 800 millones de euros.
La medida se encuadra en el plan de respuesta a la guerra, que está dotado de 6.000 millones de euros en ayudas y bajadas de impuestos y 10.000 millones de euros en avales del Instituto de Crédito Oficial (ICO).