El hecho de que seas solidario es uno de los actos más nobles que puedes practicar en tu día a día. Más allá de ser un valor, la solidaridad debe ser vista como una parte esencial de la vida. Aunque muchas personas la incluyen en su rutina diaria, bien sea en su núcleo familiar, de amistad, laboral o hasta con desconocidos, hace falta más gente arraigada hacia este principio. Seguramente lograríamos esa mejor sociedad que siempre hemos anhelado, pero solo es posible a través del esfuerzo colectivo. Tú puedes ser un agente de cambio. Si eres solidario, no solamente vas a cambiar al otro, sino que también te cambias a ti mismo, y para bien.
5Te conviertes en un ser humano integral
Ser solidario es tan sólo el punto de partida para que te conviertas en una persona que valora por encima de todo el valor de la justicia, que práctica la empatía, la lealtad, la compresión y hasta la compasión. Son actitudes que definen el comportamiento humano, y en mayor proporción, determinan qué clase de persona eres. La arrogancia, la envidia, el egoísmo y hasta la falta de respeto, te alejan de ese concepto de ser virtuoso que con sus palabras y acciones, es capaz de ponerse en los zapatos de los demás sin hacer ninguna ofensa.