En el momento en que se intenta traducir a otros idiomas algunas frases españolas, como a palo seco, ponerse las botas, no hay tu tía, supone para la mayor parte de las personas un serio problema. Pero sin duda, resulta mucho más sencillo cuando se conoce cuál es el origen de estas expresiones.
2El boca a boca
La mayor parte de los dichos populares se han ido transmitiendo con el paso de los años de una generación a otra de forma oral, por lo que no es muy habitual verlos escritos. Esta circunstancia han provocado que su grafía se haya distorsionado en algunos casos y se haya extendido erróneamente la idea de que “tutía” se escribía separado y por consiguiente, haciendo referencia a la hermana del padre o de la madre, es decir, la tía.