No cabe duda que el yogur es uno de los productos lácteos más saludables, cuyo consumo periódico se recomienda a todos los seres humanos desde muy temprana edad. Los pediatras lo recomiendan para los niños pequeños, porque sus componentes ayudan a reforzar el sistema inmune y a darle parte de los nutrientes que necesitan.
Pero, a pesar de que el yogur se produce gracias a unos microorganismos que se desarrollan en la leche, se pone malo, esto es, que tiene un lapso que se considera óptimo para su consumo, pasado el cual no debes tomarlo, por eso queremos explicarte los datos que necesitas saber para determinar si ese yogur que tienes en la nevera se ha puesto malo.
4¿Cual es el paso que sigue después de los procesos que requieren calentamiento?
Cuando el preparado se enfría, es cuando se puede añadir el azúcar, las frutas y los ingredientes que distinguen cada una de las clases de este producto, con lo que se logra sacar al mercado una gran variedad de yogures y se procede a envasarlos en el empaque correspondiente, dependiendo de la textura del yogur que se haya elaborado.
El paso final es que el yogur debe enfriarse y se almacena en neveras a temperaturas de refrigeración de unos 5º C, que es el equivalente a 40º, para poder retrasar la degradación microbiológica, química y física.