El pleno de Barcelona de este viernes ha rechazado una proposición de Cs que pide dejar sin efecto la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) tras la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) que anula la ordenanza.
La proposición ha contado con los votos a favor de Cs, PP, Valents y la concejal no adscrita, Marilén Barceló, la abstención de Junts, y los votos en contra del Gobierno municipal (BComú y PSC) y ERC.
La iniciativa ha entrado en el pleno por una moción de urgencia y también reclama retirar las multas impuestas hasta ahora y paralizar la imposición de nuevas sanciones, y tramitar una nueva ordenanza para regular la ZBE que corrija las cuestiones que señala la sentencia del TSJC.
Durante la presentación de la proposición, la presidenta de Cs en el consistorio, Luz Guilarte, ha criticado que la ordenanza se ha realizado «de manera improvisada», con falta de rigor y consenso, y considera que no se ha tenido en cuenta la afectación que tiene para los ciudadanos, por lo que ha insistido en que se ha aplicado mal.
BADIA DEFIENDE EL CONSENSO
Ante las críticas de los grupos de la oposición, el concejal de Emergencia Climática, Eloi Badia, ha recordado que la ordenanza se ha hecho con consenso institucional y de la ciudadanía, y ha asegurado que no se ha hecho «deprisa y corriendo» y que se ha desarrollado con un calendario de amortización para no perjudicar a los ciudadanos.
Además, ha insistido en que nunca han situado un calendario para vetar los vehículos con etiqueta amarilla (B): «Es una tarea que se debe hacer con máximo consenso, que se tiene que prever con mucho tiempo y ahora no es el momento en el que se tendría que hacer un anuncio de estas características».
«POLÍTICAS MAL ENFOCADAS»
El concejal Max Zañartu (ERC) ha destacado que no es la primera vez que un tribunal «tumba una ordenanza por un defecto de forma», ha recordado que su grupo avisó de que los estudios previos a la implementación no contemplaban alternativas, y ha recalcado la importancia de establecer un calendario a largo plazo que de confianza en la medida.
Por su parte, Francina Vila (Junts) ha criticado que el Gobierno municipal impulsa «políticas mal enfocadas» con el apoyo de ERC, a los que ha avisado que se les girará en contra –ha dicho–, y ha pedido que escuchen a la oposición y usen las herramientas que se les ofrece.
Óscar Ramírez (PP) ha lamentado que «Colau intenta imponer un modelo de ciudad que no es el que necesita Barcelona» y ha criticado que el Gobierno municipal no tiene voluntad, según él, de implementar mejoras en la ordenanza.
Por último, Eva Parera (Valents) les ha pedido que no recurran la sentencia porque augura que el Tribunal Supremo no aceptará el recurso y cree que con la ZBE el Ejecutivo local escogió «el camino rápido y fácil».