Cada año, al comenzar a subir la temperatura, indicando que está llegando la primavera, con ella vuelven las temibles orugas procesionarias. Esta oruga es naturalmente de zonas donde hay pinos y es muy común en todo tipo de parques; son muy peligrosos por los finos pelos urticantes, esta es la razón por la que se debe mantener a raya.
¿Qué es la procesionaria del pino?
Son unas mariposas de hábitos nocturnos, que en su fase adulta es inocua a los humanos; pero la historia es distinta cuando está en su etapa de oruga; durante esta etapa atacan a las plantas y cuentan con unos pelos urticantes que al mínimo contacto con la piel son sumamente irritantes.
Reciben este nombre por que en temporada de primavera-verano; cuando salen bajan de los pinos y realizan una fila interminable lo que hace las veces de una larga procesión de allí su nombre. Comienzan a aparecer una vez suben las temperaturas y hay menos lluvia, momento en el que los adultos ponen huevos; para eclosionar de sus huevos pasan unos 28 a 30 días al mes ya le salen los temidos pelos urticantes.
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Mecanismo de defensa efectivo
Las orugas procesionarias tienen un sistema defensivo muy efectivo contra depredadores; es especialmente peligroso para perros y gatos por su naturaleza curiosa; se debe tener extrema precaución con los niños en el parque, esto por su curiosidad los pueden querer agarrar e incluso llevárselo a la boca.
Esta reacción que provoca este mecanismo de defensa puede ir desde leve hasta muy grave y requiera una visita a la sala de emergencias; esto va a depender de cómo reaccione el organismo del afectado, si se sobre estimula su sistema inmune puede causar un shock anafiláctico.
Los perros las principales víctimas de las orugas procesionarias
Los perros por su naturaleza curiosa generalmente son las principales víctimas; cuando son atacados por los pelos urticantes de las orugas pueden provocar reacciones leves a graves; generalmente las lesiones ocurren en la lengua y la boca; causando una gran irritación, en este caso debes llevarlo a una clínica.
Es importante actuar a tiempo ya que se han visto casos donde se necrosa la boca y la lengua, y han tenido que ser intervenidos quirúrgicamente.
Cómo controlar las orugas procesionaria
Para realizar un control biológico de estas orugas, ya que estas muchas veces se alimentan de las plantas del jardín; su control se debe al peligro potencial que tienen sus pelos urticantes para las personas y los animales de casa. Para ello se usará una forma de matar cierta cantidad de estas orugas y las otras consisten en hacer repelentes para evitar que lleguen a nuestro jardín o casa.
Para eliminar a las orugas procesionarias se deben emplear varias técnicas como el control biológico; que es una de las formas de control de plagas más recomendada, porque no alteras el entorno, simplemente incorporas al área; depredadores naturales de las orugas en todas sus etapas, esto disminuirá la población de orugas procesionarias.
Si quieres controlar la población de estas orugas en tu jardin, trata de darle albergue a los siguientes insectos y animales que son los depredadores naturales de estas orugas, entre las que encontramos:
- Hormigas
- Avispas
- Chicharras
- Murciélago
- Lirón
- Mirlo
- Urraca
- Cuervo
Elimina los nidos de las orugas procesionarias
Si en tu jardín hay árboles o plantas grandes busca con mucho cuidado, posibles nidos de estas orugas, si en tu jardín tienes nidos debes retirarlos recuerda colocarte gafas de protección y guantes.
Para alejar estas orugas que se pueden devorar tus plantas, puedes eliminarlas de tus plantas con una solución de agua con un poco de jabón, esto eliminará también otras plagas, para esta solución solo requieres un recipiente con rociador, le agregas agua y un chorro de lavaplatos líquido, remueve muy bien hasta que se diluya en el agua.
Donde veas un nido de orugas rocíalas con la solución esto es un potente repelente para estos insectos, repite el tratamiento dos veces al día. A esta solución le puedes agregar también colillas de cigarrillos o cenizas y mezclarla bien estos restos contienen sustancias tóxicas que eliminan o repelen a las orugas.
Otra forma de preparar un potente repelente es calentando agua y agregando 2 cigarrillos al agua, una vez hierva se deja reposar hasta que esté a temperatura ambiente, luego se vierte en un envase con rociador y listo aplica esta solución en los nidos, hojas donde veas a estas orugas; también debes rociarlas en las mañanas y en las tardes.
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La solución no debe ser muy concentrada para evitar que afecte la salud de las plantas y árboles, solo se requiere que ellas mismas migren a unas zonas donde no haya peligro para la población local.