Los grupos parlamentarios de PP y Vox necesitarían el apoyo de al menos 13 diputados de la izquierda para aprobar su modificación de la Ley del Estatuto de Autonomía de la Comunidad de Madrid para reducir el número de diputados de la Asamblea de Madrid de 136 a 91.
Esta mañana Vox y PP han registrado la propuesta de reforma como ya acordaron en el pacto de investidura de la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso. Requerirá, en todo caso, la aprobación de la Asamblea por mayoría de dos tercios y la aprobación de las Cortes Generales mediante ley orgánica.
Sería necesario que apoyasen esta reforma un total de 91 diputados, ya que, según han explicado fuentes parlamentarias, dos tercios serían el 90,67 y, por lo general, cuando se supera el cinco en los decimales se pasa al siguiente número.
PP y Vox suman 78 diputados, por lo que necesitarían el apoyo de Más Madrid (24) o PSOE (24). Con Unidas Podemos no llegarían a alcanzar esos dos tercios porque se quedarían en 88 diputados, sumados los 10 parlamentarios de la formación ‘morada’.
En el actual Estatuto de Autonomía se establece la Asamblea estará compuesta por un diputado por cada 50.000 habitantes o fracción superior a 25.000, de acuerdo con los datos actualizados del censo de población. El mandato de los Diputados termina cuatro años después de su disolución de la Cámara en los supuestos previstos en este Estatuto.
La reforma registrada por PP y Vox Madrid cambiaría el criterio por el que el número de diputados viene determinado en función del censo de población (uno por cada 50.000 habitantes) por uno fijo que determina un número «suficiente» de diputados para desarrollar las funciones de la Asamblea «de manera eficiente». Así, de llegar a aprobarse esta Proposición de Ley en el Pleno, la Cámara quedaría reducida de 136 a solo 91 diputados.
DIFÍCIL APOYO DE LA IZQUIERDA
No obstante, parece que PP y Vox tienen difícil que los grupos de izquierda apoyen su propuesta. Tanto Más Madrid como Unidas Podemos han tildado el acuerdo de «oscuro, unilateral y que va encaminado a recortar la democracia» con la pretensión de convertir «la Asamblea de Madrid en la Asamblea de Putin».
El único que se ha abierto a, al menos, hablar de propuestas concretas, escucharlas y valorarlas, es el portavoz del PSOE, Juan Lobato. No obstante, ha explicado que en Madrid hay una menor proporción de diputados con respecto a la media en España y ha incidido en que hacen falta «políticos que trabajen», si fuera para confrontar «bastaba con una persona».
El secretario general del PSOE-M aboga por que los diputados se «pateen el territorio conociendo en detalle esos problemas que competen a la Comunidad de los que nunca habla la presidenta y de los que pocas veces habla la portavoz de Vox».
La portavoz de Vox, Rocío Monasterio, ha insistido a los grupos de la izquierda en la necesidad de que apoyen esta modificación de la ley para que se produzca reducción de gasto político en un momento en el que las familias lo están «pasando muy mal», mientras que el portavoz del PP, Alfonso Serrano, ha trasladado a estos partidos que no comparte que «a más cargos públicos más democracia» y ha pedido «no caer en demagogia».