La Comisión Europea ha aplaudido este lunes el acercamiento de España a Marruecos, después de aceptar el plan marroquí de autonomía para el Sáhara Occidental, aunque ha recordado que el estatus de este territorio debe dirimirse en un proceso político acorde con las resoluciones de Naciones Unidas.
«Sobre la posición de España, la Unión Europea saluda los desarrollos positivos entre los Estados miembros y Marruecos en la relación bilateral que benefician la asociación de la UE y Marruecos», ha asegurado la portavoz de Exteriores de la UE, Nabila Massrali.
El Gobierno de Pedro Sánchez anunció el pasado viernes una «nueva etapa» en la relación con Rabat, tras reconocer en una misiva al rey Mohamed VI que el plan de autonomía para el Sáhara Occidental planteado por Marruecos constituye «la base más seria y realista» para lograr una solución a este conflicto.
En todo caso, Massrali ha recordado que la cuestión del Sáhara Occidental debe resolverse a través de un proceso político, acorde con las resoluciones de Naciones Unidas. «La solución debe ser política, justa, realista, pragmática, sostenible en el tiempo y mutuamente aceptada», ha insistido la portavoz comunitaria.
Con este paso, Sánchez cede a las presiones de Rabat que pedía claridad a Madrid sobre el plan para la antigua colonia española. No obstante, este giro ha abierto otro frente con Argelia, que asegura que el Gobierno español nunca le informó de antemano y ya ha llamado a consultas a su embajador en Madrid.