El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha ofrecido este lunes su respaldo al enviado de la ONU para el Sáhara Occidental, Staffan de Mistura, en sus esfuerzos de mediación entre Marruecos y el Frente Polisario tan solo tres días después de que el Gobierno respaldara el plan de autonomía marroquí para la antigua colonia española.
Según ha contado el propio Albares en su Twitter, se ha reunido con De Mistura en Bruselas, donde el ministro asiste a una reunión con sus homólogos de la UE.
El objetivo del encuentro, el tercero entre ambos desde el nombramiento de De Mistura el pasado octubre, ha sido transmitirle «el apoyo de España a su labor para alcanzar una solucion mutuamente aceptable en el marco de Naciones Unidas», ha precisado, pronunciándose así en línea con la posición tradicional de los sucesivos gobiernos españoles.
Sin embargo, el viernes Marruecos desveló que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, había indicado en una carta remitida a Mohamed VI que «España considera la iniciativa marroquí de autonomía, presentada en 2007, como la base más seria, creíble y realista para la resolución de este diferendo».
El reconocimiento por parte de España, confirmado posteriormente por Albares, de que el plan de autonomía, que dejaría al Sáhara dentro de Marruecos, constituye la «base más realista» para resolver el contencioso provocó que Marruecos anunciara el inicio de una nueva etapa en la relación, que quedará sellada con una visita del ministro a Rabat antes del 2 de abril a la que seguirá otra de Sánchez.
En contrapartida a cerrar la crisis con Marruecos desencadenada tras la acogida del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, el Ejecutivo ha abierto una nueva crisis con Argelia, que llamó el sábado a consultas a su embajador en Madrid y que niega que el Gobierno les informara por adelantado de sus planes, como sostienen fuentes gubernamentales.