Para nadie es un secreto que San Patricio es el santo patrón de Irlanda, y que su festividad se ha repartido por todo el mundo. En muchas ciudades hoy predominan los tréboles y el color verde por todas partes, con grandes celebraciones y desfiles, aunque debido a la pandemia, es probable que las celebraciones hayan sufrido algunas modificaciones, pero de todas maneras va a ser recordado con mucho cariño por sus fieles y en todo sitio en el que se encuentre un irlandés.
San Patricio
La tradición católica nos enseña que San Patricio nació con el nombre de Maewyn, finalizando el siglo IV, en una pequeña villa escocesa. Fue hijo de un soldado romano y durante su adolescencia fue apresado por piratas irlandeses, convirtiéndolo en esclavo. Luego de haberlo intentado varias veces, San Patricio logró escapar y esto le permitió recorrer Irlanda, logrando establecer múltiples comunidades cristianas, pero fue muy inteligente, porque logró combinar las tradiciones cristianas con las tradiciones de los pobladores de Irlanda, falleciendo un 17 de marzo.
Gracias a esta labor, fue posible que el cristianismo se expandiera en Irlanda, y gracias a la emigración de los irlandeses, hacia muchos otros lugares del mundo, una muestra de ello es la ciudad de New York, donde celebrar a San Patricio no sólo es una tradición religiosa, sino una gran festividad, que se celebra con grandes desfiles, tal como en Dublín, y en la que se utiliza al trébol como el símbolo de la Santísima Trinidad, por sus tres hojas.
Hoy no sólo celebramos a San Patricio, sino que Irlanda hizo coincidir la fundación de la República con este día, por lo que es más que un símbolo religioso, de hecho, se le considera un símbolo nacional. Por ello, hoy se celebra igualmente la fiesta nacional de ese país, en la que no sólo se festeja su decisión como nación, sino su gran vocación cristiana como país, porque es la nación constituyente británica de Irlanda del Norte que celebra más que todo sus costumbres, porque, a pesar de compartir su territorio con una mayoría protestante durante el período de la unión de la isla en el histórico señorío y posterior reino constituyente anglo-irlandés, la creencia católica del sur predominó por encima de la cultura protestante del norte. Lo que ayudó a de fundación de la gran nación de Irlanda del Sur, separada de la dominación Británica. Desde los últimos años del siglo XX, esta festividad se celebra a nivel mundial, debido a la extensa emigración irlandesa en países como Francia y España e incluso en lugares alejados de Europa como Estados Unidos y Canadá, en algunos de los cuales no se trata de una simple festividad, sino que lo denominan el festival de San Patricio.
El 17 de marzo celebramos a otros santos y beatos, además de San Patricio, cuyas vidas y obras contribuyeron a la expansión del cristianismo en el mundo, entre los cuales tenemos a San José de Arimatea, San Agrícola, San Juan Sarkander, San Pablo de Chipre, Santa Gertrudis de Nivelles, Beato Conrado de Modugno y Beato Juan Nepomuceno Zegri y Moreno.