Confesando que están enamoradísimos y que su relación está cada vez más consolidada, Marta Riesco no ha dudado en los últimos días en gritar a los cuatro vientos lo feliz que es al lado de Antonio David Flores, con quien, como admitía con una gran sonrisa en ‘Sálvame’ la semana pasada, le encantaría pasar por el altar.
Una boda que no llegará mientras el excolaborador no se divorcie de Olga Moreno; un paso definitivo, por lo que cuenta su entorno, no tiene pensado hacer por el momento. Una decisión que habría provocado más de una discusión con la reportera de ‘El programa de Ana Rosa’, que estaría deseando ‘formalizar’ su noviazgo con Antonio David después de varias intensas semanas en las que han afianzado a pasos agigantados su historia de amor.
Pero mientras el enlace parece que tendrá que esperar, lo que es innegable es que el padre de Rocío Flores ya está completamente instalado en la casa que Marta tiene alquilada al norte de Madrid, donde ya hace vida completamente normal.
A caballo entre la capital y Málaga, Antonio David ha aprovechado uno de sus últimos viajes a su ciudad natal para ver a sus hijos David y Lola para recoger las últimas pertenencias que tenía en el domicilio familiar – donde se ha quedado Olga con los niños – y continuar con su mudanza al nidito de amor que comparte con la dicharachera reportera.
Así, hemos pillado al excolaborador llegando a la casa de Marta en un taxi, cargado con dos maletas y su inseparable neceser. Con una gorra para intentar pasar desapercibido, Antonio David ultima el traslado de sus pertenencias al coqueto piso del que la periodista da cada vez más detalles a través de sus redes sociales, pletórica por el hogar que está creando al lado de su novio.