El flan es uno de esos postres milenarios; se conocía muchos siglos antes de Cristo y era elaborado por los fenicios, griegos y romanos. Era conocido como Tyropatina y se preparaba de una forma muy rudimentaria. Durante la edad media se hizo muy popular durante la cuaresma, ya que la iglesia prohibía el consumo de ciertos alimentos.
Con el pasar de los años la receta evolucionó, se le fueron agregando otros ingredientes y se convirtió en ese delicioso, cremoso y dulce postre que conocemos en la actualidad y del cual, en diferentes partes del mundo se han realizado las más diversas versiones.
9La cocción perfecta del flan
Una vez transcurra el tiempo según el método de baño Maria que hayas empleado, saca la flanera y deja enfriar a temperatura ambiente. Cuando esté frío, llévalo a la nevera por al menos 6 horas.
Una vez este refrigerado, retíralo de la nevera, despega los bordes de la flanera y voltéala sobre un plato. Tendrás un flan espectacular cubierto de caramelo, cremoso y firme.