ERC celebra una Conferencia para reforzar la vía negociada

ERC celebrará este fin de semana una Conferencia Nacional en la que aprobará su nueva ponencia política, que actualiza la estrategia de los republicanos reforzando la vía negociada con el Gobierno para solucionar el «conflicto catalán», aunque plantea el «desbordamiento democrático» y la desobediencia si falla la mesa de diálogo con el Ejecutivo central.

La Conferencia se hará en La Farga de L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona), el mismo escenario en el que en julio de 2018 ERC hizo su última Conferencia de este tipo que sirvió para consagrar su giro estratégico hacia el diálogo y su hoja de ruta dirigida a ampliar la base del independentismo.

El sábado contará con la intervención del presidente de la Generalitat y coordinador nacional del partido, Pere Aragonès, que inicialmente debía pronunciar su discurso el domingo pero finalmente ese día acudirá a la Conferencia de Presidentes en La Palma, y de la secretaria general, Marta Rovira, desde Ginebra (Suiza).

También habrá dos mesas redondas a puerta cerrada, una sobre resolución de conflictos con el coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi, y el presidente del Sinn Féin, Declan Kearney, y otra sobre «transformaciones republicanas». El domingo se votará la ponencia política después de que la exponga la secretaria general adjunta y portavoz del partido, Marta Vilalta, y el líder republicano, Oriol Junqueras, dará el discurso de clausura.

NO CONCRETA LAS ALTERNATIVAS

La ponencia, que ha coordinado el exconseller y actual vicesecretario general de prospectiva y Agenda 2030 de ERC, Raül Romeva, y que lleva por título ‘Escrivim el futur republicà (Escribimos el futuro republicano), fija la estrategia de los republicanos afianzando la apuesta por la mesa de diálogo sin ningún cambio sustancial en la dirección que han seguido los últimos años.

Además de llamar a la movilización de la ciudadanía para contribuir a presionar al Gobierno en la resolución del conflicto, el documento argumenta la necesidad de «mantener el trabajo constante para construir alternativas democráticas para afrontar el embate democrático», siguiendo la línea que abrió Aragonès en su discurso de Navidad, en el que avisó de que se debían comenzar a preparar otras vías si la negociación fracasa.

Así, ERC plantea la desobediencia política y social y las «acciones de desbordamiento democrático» como posibles alternativas para lograr un referéndum, aunque no concreta cómo se deben llevar a cabo ni en qué deben consistir, al igual que tampoco detalla en qué momento ERC dará por fracasada la mesa de diálogo.

«No renunciamos ni renunciaremos a ningún instrumento democrático que nos permita decidir nuestro futuro colectivo para llegar a la república catalana, desde acciones de desobediencia política y social hasta a acciones de desbordamiento democrático para hacer posible el derecho a la autodeterminación», afirma la ponencia, que rechaza poner fechas fijas y hojas de ruta inamovibles.

EXHIBICIÓN DE FORTALEZA

Con esta Conferencia, los republicanos buscan hacer una demostración de fortaleza del partido en un momento en el que poseen la Presidencia de la Generalitat, son determinantes en el Congreso y son uno de los principales partidos a nivel municipal, por lo que quieren visibilizar que han ganado poder y peso político desde su última Conferencia de 2018.

Fuentes republicanas han defendido que se quiere mostrar la «seguridad» de la formación en su estrategia, ante las críticas constantes de Junts y la CUP a la mesa de diálogo y los obstáculos que creen que pone el PSOE a la negociación, y también en su voluntad de gobernar en el día a día.

También será el primer gran acto con la militancia tras la pandemia del coronavirus y tras la salida de Junqueras de la cárcel con el indulto, de manera que se mostrará la ‘bicefalia’ entre el presidente de ERC –Junqueras– y el presidente de la Generalitat -Aragonès–, además de que quieren reivindicar que su secretaria general –Marta Rovira– sigue en el «exilio».

COHESIÓN INTERNA

Con esta Conferencia, ERC quiere exhibir la cohesión interna del partido, ya que previsiblemente la ponencia se aprobará con una amplia mayoría y, de hecho, llega sin ninguna enmienda parcial viva.

Tras el debate del documento entre la militancia y los órganos territoriales, se presentaron 512 enmiendas, de las cuales 61 se aceptaron literalmente, 380 se transaccionaron, 11 decayeron por cuestiones de forma y 59 fueron retiradas, de manera que se han incorporado más de 400 enmiendas al texto definitivo.

El sector crítico de ERC denominado Col·lectiu Primer d’Octubre presentó una enmienda a la totalidad a la estrategia del partido pero se rechazó de manera amplia en todos los congresos territoriales, pero en la Conferencia se votará una que se presentó en la federación de la ‘Cataluña nord’ porque en este territorio se están reestructurando los órganos del partido y no se ha podido debatir, así que se votará directamente en el plenario.

Una de las enmiendas que se han incorporado al documento defiende la necesidad de trabajar en la construcción de «espacios de soberanía» en paralelo al proceso de negociación con el Gobierno, pero fuentes del partido han asegurado que las enmiendas no han tenido una afectación relevante a la estrategia independentista y la apuesta por el diálogo, sino que la mayoría son sobre cuestiones sectoriales.

Y es que la ponencia también plantea la necesidad de que haya un «buen gobierno» desde la Generalitat para impulsar las mejores políticas para la ciudadanía, sitúa los objetivos estratégicos que quieren alcanzar antes de 2030, en cuestiones como el refuerzo del estado del bienestar y la lucha contra el cambio climático, y también fija el horizonte para la década de 2040.

De esta manera, los ámbitos de medio ambiente y energía son los que han tenido un mayor número de enmiendas, por lo que el partido cree que el posicionamiento ecologista de ERC ha quedado reforzado, mientras que también ha habido muchas sobre la política territorial para reafirmar el concepto de la «Cataluña entera».