Hacer un bizcocho de almendra esponjoso y delicioso es realmente sencillo. Una masa aireada y con ese olor tan característico y delicado de este fruto seco, abren las puertas a una experiencia olfativa y gustativa que no podrás rechazar.
Su preparación no es para nada complicada y combinando harina, huevos, azúcar, polvo de hornear y por supuesto la más delicada almendra molida, te permitirán disfrutar de toda una caricia al paladar. No te pierdas este paso a paso y disfrutarás de un bizcocho de almendras que resultará ser una deliciosa nube en tu boca.
5Trabaja las yemas
Una vez que tengas las claras bien montadas, es el momento de comenzar a batir las yemas en el recipiente en el que las tienes reservadas.
Para batir las yemas, coloca el bol sobre otro de mayor tamaño que contenga agua caliente para proceder a un baño María. Añade el azúcar restante y comienza a batir para integrar por completo el azúcar a las yemas. Bate hasta lograr que las yemas dupliquen su volumen y tengan un color blanquecino.