El arroz blanco perfecto no existe; o eso era al menos lo que pensabas hasta ahora, pues, con esta receta podrás comprobar por ti mismo que este grano delicioso y nutritivo sí puede quedar perfecto siguiendo unos sencillos pasos para su preparación.
Es una verdad innegable; a todos nos ha quedado alguna vez un arroz blanco seco, empastado e incluso quemado. Y es que, al ser un alimento sencillo, muchas veces se subestima y su cocción pasa a ser parte del azar.
En estos pasos que te compartiremos a continuación, te contaremos todo lo que necesitas saber para qué lo prepares perfecto de manera definitiva.
5Escurrido, un paso que no te puedes saltar
Al finalizar el remojo de media hora en agua caliente, deberás escurrirlo muy bien. Ponlo en un colador para que el agua se elimine por completo y déjalo un rato escurriendo.
De hecho, si puedes, ayúdate de un secador para soplar aire caliente y así dejar los granos los más secos posibles después de haberlos remojado en caliente.