Un aguacate en mal estado realmente puede arruinar tu día. Estos cinco consejos desenmascaran la fruta que se ha echado a perder.
Para una tostada de aguacate decente, necesitas un buen aguacate. Debe ser suave y ceder un poco bajo una presión suave, pero no demasiado. Además, la pulpa levemente a nuez debe ser agradable y verde y no tener manchas marrones.
5Pulpa fibrosa
A menudo, solo descubres si el aguacate está malo o bien cuando lo abres. La pulpa perfecta es de color verde claro; si se estropea, se vuelve marrón o negra. Sin embargo, las pequeñas decoloraciones puntiformes de la pulpa se pueden cortar generosamente para que el aguacate siga siendo comestible, incluidas las partes no contaminadas.
Si la carne es muy fibrosa y tira hilos finos, esto también es una indicación de que el aguacate se ha echado a perder. Entonces ya no se debe comer.
