A estas alturas del partido, ya Robert Moreno sabe que la derrota siempre le hace sombra a cualquiera director técnico, y en cualquier momento llega la gran patada. Esperada o no, pero a todo santo le llega su día. Quizás, es duro, no deja de serlo, porque antes de ser estratega es un ser humano. Sin embargo, ese es el precio que tiene que pagar por sus malos resultados. Entre despidos y polémicas, el seleccionador español se ha visto nuevamente cara a cara con las noticias negativas. No sería la primera vez, pero desde luego, no la olvidará. Se apaga un sueño más en su carrera tan controversial.
5Robert Moreno pasó sin pena ni gloria
Así como en el Mónaco francés pasó sin pena ni gloria, la misma historia se repite en LaLiga Santander. Su llegaba al banquillo supuestamente era para forjar una etapa de éxitos en el club, cosa que nunca fue así. Comenzó en el torneo local con revés, en la Copa del Rey deslució, y contra equipos que en teoría eran de menor nivel.
A partir de allí, todos empezaron a entender que este movimiento de entrenador fue un auténtico fiasco. Y se concretó cuando no hizo nada para que el jugador venezolano Darwin Machís se quedara y los males se acrecentaron. No halló una alineación competitiva, y si bien intentó revertir sus errores, nunca dio con el objetivo. Se va a casa con su finiquito millonario, pero con el desprecio de la gente.