Salir con amigos o compañeros de trabajo a un bar, significa que vas a disfrutar de las tapas que estos establecimientos ofrecen a sus clientes; es algo que se institucionalizó en España. Salir a tapear con amigos es parte de la cultura gastronómica y social de esta era.
Pero tapear de vez en cuando no es malo, te libera del estrés y terminas pasando un rato agradable; sin embargo, cuando lo conviertes en un hábito diario, pierde su esencia y se convierte en rutina. Además, puede provocar graves problemas de salud, esto debido al tipo de comidas consumidas en las tapas. Las tapas generalmente, son muy ricas en grasas saturadas, por lo que son de muy alto aporte calórico.
2Morcilla de Burgos unas buenas tapas
La morcilla es una preparación a base de sangre y grasa de cerdo, se aliña sazona y se le añade arroz, en cada región del país le dan su toque particular, con esta mezcla se rellena las tripas del cerdo, para hacer una especie de embutido, una vez lista, se fríe en abundante aceite y se corta en rodajas y se sirve.
Para la presentación de las tapas se colocan dos rodajas medianas en una rebanada de pan. Según la Federación Española de nutrición la morcilla es la carne procesada con alto contenido de grasas saturadas y colesterol, se estiman 445 Kcal y 35 gramos de grasa.