La morcilla de caldera es uno de los platos más tradicionales de Jaén; y es tan fácil de preparar, que lo puedes hacer en casa sin ninguna complicación. Su sabor es tan rico y sutil, que hará que te olvide para siempre de la morcilla frita. Anímate a prepararla y no te arrepentirás.
Cuando la prepares en casa con esta receta que estoy por ofrecerte, se convertirá en tu favorita y solo querrás disfrutarla de manera 100 % artesanal. Rendidora, rica y fresca. Te va a encantar.
8La importancia del calor
Durante el proceso de cocción de la morcilla de caldera, debes mantener la temperatura baja en todo momento. De esta manera todos los sabores se fusionan de manera correcta; y además, la sangre se va espesando poco a poco.
Una vez que añades la sangre, el arroz y las cebollas a la olla, añade también los aliños, la pimienta blanca, la sal, nuez moscada y pimentón dulce. Mientras se va cocinando a fuego bajo, remueve constantemente.