La crema de calabaza es una de las sopas favoritas, ya que su rico sabor y consistencia, la hacen perfecta para disfrutar en cualquier momento. Con esta verdura es sencillo preparar unas verdaderas delicias. Es económica, la consigues en cualquier mercado y en temporada se encuentra en su mejor estado: con un color naranja intenso increíble y un sabor realmente divino.
Hacer una crema de calabaza bien cremosa y sabrosa como para tomar en una cena, es algo fácil de lograr cuando sigues una técnica correcta. Acompáñame a descubrir todo lo que necesitas saber para tener un resultado perfecto y de gran sabor.
6Prepara un sofrito lleno de sabor
Con esta receta, así como cuidarás la cremosidad, también vas a garantizar el máximo sabor. Ya con el solo hecho de asar la calabaza, el sabor de esta verdura quedará supremo. Pues bien, con el siguiente sofrito, quedará aún mejor.
Mientras la calabaza termina de hornearse, lava y pica el puerro en julianas, pica finamente los dientes de ajo y ralla el jengibre en caso de usarlo fresco. Pon todos estos ingredientes en una olla y llévalos al fuego medio con un chorrito de aceite de oliva virgen extra.