Casado defiende un Gobierno de Mañueco sin Vox

El líder del PP, Pablo Casado, ha expresado su apoyo a Alfonso Fernández Mañueco para buscar un Gobierno «en solitario» sin Vox, un partido contra el que ha cargado duramente por estar «más preocupado» por sustituir al Partido Popular que por cambiar el Ejecutivo de Pedro Sánchez. Tras reivindicar el proyecto reformista de centroderecha que representa el PP, ha dejado claro que su formación no renunciará a sus principios en las negociaciones para formar gobierno.

«¡El PP ha ganado las elecciones en Castilla y León!», ha arrancado Casado su intervención ante el Comité Ejecutivo Nacional del PP, convocado para analizar los resultados de las elecciones autonómicas del domingo, en la que el PP logró 31 escaños, dos más que en 2019, pero lejos de los 41 escaños de la mayoría absoluta. Previamente ha tomado la palabra el presidente en funciones de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco.

Tras expresar su apoyo al «Gobierno fuerte, estable y en solitario» que ha planteado Mañueco, ha recalcado que el candidato del PP a la reelección cuenta con el respaldo del Comité Ejecutivo del PP «para llevarlo adelante» con los principios del PP «siempre presentes». «Nuestros principios son nuestras condiciones. Quien quiera pactar con el PP tendrá que aceptarlos y respetarlos», ha manifestado.

SACA PECHO DE LA VICTORIA DEL PP «PESE A TODO Y A PESAR DE TODOS»

El jefe de la oposición ha señalado que el PP ha ganado los comicios «pese a todo y a pesar de todos» mientras que los socialistas «las han perdido, a pesar de sus trampas y mentiras», aludiendo al aludiendo al «uso» del CIS, el «BOE para comprar votos», «los fondos europeos para hacer propaganda» y la «Fiscalía general del estado para señalar adversarios».

En este punto, ha destacado las «cuatro derrotas» que acumula Sánchez desde las últimas generales y ha resaltado que, por lo tanto, «será el sanchismo» y no el PP «el que tendrá que plantearse por qué pierde a pesar de poner toda su maquinaria de poder al servicio del partido».

Tras recalcar que si Mañueco no hubiera convocado elecciones habría un Ejecutivo del PSOE en la Junta por una moción de censura, ha resaltado que la dirección nacional del PP «jamás» ha «presionado» ni «opinado» sobre el adelanto electoral, ni en Castilla y León ni en ningún otro sitio.

«Repito: jamás», ha proclamado, para avisar que no iba a permitir que «se mienta» y se les «insulte impunemente a todas horas y en todas partes». Según ha dicho, nunca se había vivido «una lluvia ácida de fake news subastadas al mejor postor, y una campaña de post verdad tan corrosiva como ésta».

REIVINDICA UN PP REFORMISTA EN EL CENTRODERECHA

Dicho esto, ha lanzado un «un mensaje de optimismo» a nivel nacional y que ve «incontestable». «Ningún otro partido de centro derecha en Europa está a la cabeza de las encuestas y recuperando gobiernos cada vez que se llama a las urnas», ha dicho a los suyos, cosechando una ovación.

Casado ha afirmado que el PP busca hacer del centroderecha «la piedra angular de una nueva etapa de reformas y progreso para todos los españoles» y rechazar «el bloque de ruptura que forman hoy los populismos a un lado y a otro». Según ha dicho, su partido se ofrece como «plaza mayor del constitucionalismo, del reformismo, del autonomismo, del europeísmo y del atlantismo».

Además, ha indicado que «nadie está en condiciones de ejercer ninguna supuesta tutela moral o programática sobre el Partido Popular». «Y debemos ser claros sobre esto: la semilla del populismo y del radicalismo puede tardar más o puede tardar menos en dejar ver su fruto, pero siempre es un fruto amargo para las sociedades que lo cultivan», ha alertado.

En este sentido, ha subrayado que «el populismo y la radicalidad nunca producen progreso, ni concordia, ni respeto internacional». Es más, ha dicho que «nunca pacifican ningún conflicto» sino que «los empeoran todos» y «nunca resuelven ningún problema, solo los multiplican».

«Nunca reúnen, siempre enfrentan. Nunca construyen, siempre destruyen. Nacen para eso, es lo que buscan y es lo que hacen tarde o temprano porque no creen ni en las instituciones ni en la política como tarea para la convivencia, aunque las utilicen para vaciarlas desde dentro, aumentar la polarización y debilitar el sistema», ha aseverado.

Tras asegurar que no está en política «para llegar como sea, donde sea ni para hacer lo que sea», ha señalado que él está para llevar «el gran proyecto reformista y liberal del Partido Popular de nuevo al Gobierno». «El PP es el centroderecha español, no hay otro.El PP es la alternativa a los populismos y a los radicalismos de izquierda y de derecha, no hay otra», ha proclamado, para añadir que «nadie» les va a mover de ese sitio.

Tras presentar la agenda reformista que defiende el PP, ha cargado duramente contra la formación de Santiago Abascal. «No nos engañemos; hay quienes equivocan sus prioridades, y están más preocupados por sustituir al PP que por cambiar a este mal Gobierno. Lo segundo les resulta imposible, y lo primero, les avisamos que jamás ocurrirá», ha avisado, para subrayar una vez más que la fragmentación del voto «solo beneficia al puzzle de extremismos que desgobierna» en muchas plazas.

Tras asegurar que «lo fácil sería sumarse a las estrategias de confrontación» y «dejarse llevar en la deriva polarizadora por un puñado de votos», ha subrayado que el PP «no busca el arrastre del malestar contra nadie, sino el liderazgo de una política a favor de todos».

Casado ha recordado que la responsabilidad fundacional del PP fue «unir a todo lo que estuviera a la derecha del PSOE» y ha insistido en que ahora tiene que «conseguir el reagrupamiento de todos los constitucionalistas, incluso aquellos socialdemócratas avergonzados por lo que está haciendo Sánchez, o aquellos regionalistas que quieren seguir viviendo en una España unida y diversa».

El jefe de la oposición ha concluido su discurso con un mensaje optimista ante los suyos, subrayando que existe «una alternativa» al Gobierno de PSOE y Unidas Podemos, que «está preparada y con los mejores». «Y el tiempo nos dará muy pronto la razón», ha declarado, para añadir que el PP busca «volver a abrir espacios de libertad para la sociedad española y rechazar los procesos de radicalización».