La intolerancia a la lactosa tiene una incidencia mundial estimada en un 80% de la población mundial que padece en mayor o menor medida los síntomas; muchas personas presentan síntomas parecidos al síndrome del intestino irritable.
Sin embargo, la mayoría de las personas que tienen intolerancia a la lactosa, pueden consumir algunos productos lácteos sin presentar mayores inconvenientes, ni requieren de tratamiento alguno. La mayoría lleva un estilo de vida totalmente normal. Algunos presentan síntomas apenas distinguibles.
6Prueba de tolerancia a la lactosa
Son estudios diseñados para medir la capacidad de los intestinos de absorber la lactosa. La prueba consiste en dar a tomar a un paciente una sustancia con lactosa y se le toman muestras de sangre a los 60 minutos y a los 120 minutos.
Si la persona no sufre de intolerancia sus niveles de glucosa en sangre aumentaran en los lapsos de la prueba, en caso de no subir los niveles de glucosa en sangre indica que sus intestinos no fueron capaces de absorber la lactosa.
