En este día, rememoramos una de las apariciones marianas más renombradas, que es la de la Virgen de Lourdes, ocurrida frente ante la niña Bernadette Soubirous, en la cueva de Massabielle, en Francia, lugar que se ha convertido en un gran centro católico de peregrinación.
La aparición de la Virgen de Lourdes
El día 11 de febrero es el día que se venera la aparición de la Bienaventurada Virgen María de Lourdes, una de las advocaciones marianas más reconocidas, junto a la Virgen de Fátima, en todo el mundo cristiano, además se realizan procesiones multitudinarias y muchas curaciones milagrosas han ocurrido, por lo que el 11 de febrero también ha sido reconocido por el Vaticano como el Día Mundial de los Enfermos.
En este día celebramos la aparición de la Virgen María a la pastorcita Bernardette Soubirous en múltiples oportunidades en una región de los Montes Pirineos franceses, en una localidad muy cercana al río Gave de Pau. Este portentoso evento ocurrió un 11 de febrero de 1858, a sólo cuatro años de que la Iglesia de Roma hubiera establecido el dogma de la inmaculada concepción de la Virgen María, por medio del cual se decretó que la madre de Jesús debía ser considerada como una mujer libre de todo pecado.
Esta aparición de la Virgen de Lourdes ocurrió en una gruta, conocida con el nombre de Masabielle, sitio que a día de hoy constituye uno de los lugares de peregrinación mariana más reconocidos por los fieles creyentes, que no sólo acuden allí por devoción cristiana para rezar, sino que muchos de ellos lo hacen para solicitar un milagro.
El santuario construido con ocasión de las apariciones de la Bienaventurada Virgen de Lourdes es visitado por muchos, para encomendarse a la sagrada protección de la madre de Cristo. Por supuesto que, en principio, las autoridades eclesiásticas no le creyeron a Bernardette y a su familia, pero la Virgen se apareció a visitarla en 18 oportunidades, para asegurarse de que en ese lugar se construiría una capilla en su honor, con la finalidad de que los cristianos contaran con un sitio para poder orar y acudieran allí en procesión.
En principio, las peregrinaciones se hacían hasta la gruta, hasta que el Obispo de Tarbes-Lourdes reconoció la verdad de las apariciones marianas, por lo que se impuso la tarea de que se construyera un santuario en honor a la Virgen. Aunque todos los inviernos la cueva es preparada para la temporada de peregrinaciones, en la que también se celebran congresos a los que asisten los devotos. Es común entre los peregrinos encender velas y coger agua de la fuente de la gruta de Massabielle, formándose inmensas colas de personas.
Además de la aparición de la Bienaventurada Virgen de Lourdes, el día 11 de febrero conmemoramos a otros santos y beatos, por sus vidas y sus obras en pro del cristianismo, como es el caso de San Pedro de Jesús Maldonado, San Ardano, San Castrense, San Gregorio II papa, San Pascual I papa, San Secundino, San Severino, abad de Agaun, Santa Soteris y Beato Tobías Borras Romeu