Nadie vaticinaba el regreso de Dani Alves al Barça, pero con Xavi Hernández como dirigente cualquier cosa podía ser posible. El conjunto blaugrana, de la mano de su líder, Joan Laporta y Mateu Alemany como director, hicieron lo humanamente posible para que el defensor brasilero volviera a su hogar, al Camp Nou. Muchos no se lo creen todavía que el futbolista de 38 años de edad haya regresado a tierras catalanas. Sin embargo, aquí aplica el aforismo de que el buen hijo siempre retorna a casa. Repasamos las claves de su regreso a las filas culés.
5El buen pie que tiene Dani Alves
Una plantilla como la del Barça necesita de jugadores élites; que sean capaces de levantarle el ánimo a los futbolistas que están en crecimiento. Un Dani Alves en el equipo azulgrana, y con Xavi como dirigente, no lo imaginábamos; pero en los papeles sí era justo y necesario.
Sobre todo, porque al club le hacía falta un deportista de renombre, con experiencia, con inteligencia y con buen pie. El brasilero reúne todas estas cualidades, y lo ha llevado directamente a Ciudad Condal a jugar con Piqué y compañía.
