Existe un pueblo de Cuenca que sorprende gratamente con las vistas desde su castillo. Sí, es mágico, y a pesar de que es un lugar tan atractivo de nuestra geografía, tiene también otras cosas que lo hacen especial, aunque habitualmente se le asocia a ese castillo, que lo es todo. El día de hoy, queremos repasar un poco sobre ese destino que podrás conocer y ofrece mucho más de que podrías haber imaginado. De hecho, cuando lo conozcas, caerás en cuenta de que sí es perfección pura.
9Casi todo se conecta en este pueblo
Quizás no lo sabías, pero cuando vayas al castillo de Alarcón te darás cuenta que casi todo lo que ofrecen está conectado. Desde las puertas, torres, murallas y afines. La razón de esto, es que toda la infraestructura fue creada como sistema defensivo. En tal sentido, cada uno de los espacios se complementan y dan hacia otros lados, como la Puerta del Calabozo o la Puerta de Chinchilla. Igual tiene la Torres de Armas, que están cerca de la carretera y puedes ver la Torre de los Alarconcillos, también de defensas durante el siglo XIV.
