El Far West que retrata Hollywood en sus películas está lejos de parecerse a la vida real de los vaqueros de la época. La industria del cine y las novelas te contaron grandes mentiras que te has creído del salvaje oeste, y como tú el resto de mortales.
La icónica idea de un oeste lleno de aventuras, acción y pistolas no es del todo así. Los vaqueros más que nada atendían al ganado y las granjas, no andaban por ahí de tiroteos. Te lo contamos, sigue leyendo y te enterarás de las grandes bolas que nos han contado.
1El uso de armas estaba restringido, nada de pistolas en las ciudades
En el imaginario colectivo los vaqueros y el resto de habitantes del salvaje oeste vivían pegados a sus armas, revólveres y escopetas. Es imposible pensar en el oeste americano y no imaginar un tiroteo en un banco o un duelo a muerte en la calle.
La realidad, sin embargo, era bien distinta y aunque en su vida en los montes y granjas los vaqueros portaban armas, no lo hacían en la ciudad.
Casi todas las ciudades del oeste promulgaron estrictas normas de control de armas. Así que los famosos tiroteos retratados en las películas ocurrían porque se intentaba hacer cumplir la ley sobre armas. Un ejemplo es el famoso tiroteo de Wyatt Pearl en ok Corral contra los ladrones de ganado de la familia Dalton, fue precisamente eso un intento de hacer cumplir las normas que prohibían las armas.
