El cuerpo humano funciona con un delicado equilibrio y cuando está deshidratado, envía claras señales de que algo no va bien. La deshidratación se desencadena cuando se eliminan más líquidos de los que se consumen y este desequilibrio se manifestará a través de diversos síntomas muy fáciles de comprender.
La composición del cuerpo humano se constituye en aproximadamente un 75% de agua y sin esta no puede sobrevivir. El agua que compone mayoritariamente al cuerpo humano, se encuentra distribuida en sus células (dentro y entre ellas) y en los vasos sanguíneos.
De forma natural, el equilibrio se conserva gracias a mecanismos que desencadenan en los seres humanos la necesidad de la ingesta de agua, apenas el equilibrio comienza a alterarse.
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10Cómo prevenir la deshidratación
La mejor forma de prevenir la deshidratación, es manteniendo hidratado tu cuerpo. Esto lo alcanzas bebiendo suficiente agua y consumiendo alimentos hidratantes como frutas y verduras.
Aumenta la ingesta de líquidos en los siguientes escenarios:
- Si te encuentras practicando ejercicios extenuantes.
- Cuando la temperatura es extrema (calor intenso y frío intenso).
- Atraviesas alguna enfermedad como bronquitis, cistitis o influenza.
En el caso de los niños, si estos presentan vómitos o diarrea, no esperes hasta que esté deshidratado para tratarlo. Comienza a ofrecerle más agua y solución de rehidratación oral apenas comience a cursar la enfermedad.
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