No hay placer que se compare con el de degustar unos donuts, una taza de café y buen libro. Pienso que a todos nos ha de gustar hacer esto al menos unas cuantas veces a la semana y si son días de frío mejor aún, porque la taza de café puede transformarse en un rico chocolate a la taza que acompañará la fría mañana con un desayuno lleno de energía.
Comer donuts procesados es algo muy común; de hecho, una buena cantidad de personas en todo el mundo lo hace de manera regular. Pero, ¿te has preguntado cómo hacerlos en casa y tenerlos igual de ricos? La verdad, hacerlos no es complicado e incluso, me atrevo a asegurar que quedan mejor que los de la tienda de la esquina. ¿Te animas a comprobarlo?
5Comienza por el fermento
Ya que te he comentado un poco sobre los dos ingredientes principales para alcanzar una masa de lujo, pasemos entonces al fermento.
Pon la leche tibia y el agua en un bol y añade la levadura fresca troceada. Remueve con una cuchara de madera hasta que logres disolverla por completo.