En los últimos años la stevia ha sido ofrecida como la panacea a la hora de endulzar y son muchos los productos comerciales que puedes conseguir en cualquier anaquel del supermercado que te ofrecen este milagroso endulzante para ayudarte a comer bien dulce sin los problemas asociados al consumo de azúcares comunes.
Aunque se presenta como la gran solución, lo cierto es que este endulzante no deberías consumirlo.
6Combinada con otros endulzantes
La última moda ha sido ofrecer a los consumidores una mezcla de stevia con otros endulzantes como fructosa o sucralosa. Con una fuerte operación de marketing, se asegura tener lo mejor de ambas sustancias, cuando la verdad es muy diferente.
El consumo de sucralosa está relacionado al desarrollo de cuadros alérgicos, náuseas, problemas gastrointestinales, mareos, inflamación y migrañas. Por su parte, la fructosa, aunque considerada saludable por muchos, facilita la acumulación de grasa en el hígado, aumenta la presión arterial, el colesterol ‘malo’ y los triglicéridos. Estas son razones suficientes para mantenerte alejado de la stevia combinada.
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