La Diócesis de Barbastro-Monzón es la que en Aragón más bienes inmatriculó entre 1998 y 2015, alcanzando los 661, acogiéndose así a la posibilidad que se recogió en la reforma de la Ley Hipotecaria de 1998, que suprimió la prohibición de inscripción de los templos destinados al culto católico y que estuvo vigente hasta 2015.
Así se desprende del análisis que ha realizado la Iglesia sobre el listado de bienes inmatriculados entre 1998 y 2015 que el Ejecutivo hizo público en febrero de 2021, estudio que el presidente de la Conferencia Episcopal Española, el cardenal Juan José Omella, ha facilitado este lunes al presidente del Gobierno central, Pedro Sánchez, en un encuentro de trabajo.
La web de la Conferencia Episcopal Española recoge ese documento, según el cual, el listado del Gobierno contemplaba 2.058 bienes inmatriculados por diócesis aragonesas, si bien 43 lo fueron en un periodo diferente al mencionado, 16 tienen otros titulares y sobre 15 se han obtenido la propiedad por otras vías –como permuta, compraventa, herencia o donación–.
Además, doce no han podido ser identificados por falta de datos, ocho no están inmatriculados, cinco aparecen duplicados, tres contienen otros errores y dos pertenecen a comunidades religiosas. Estos dos últimos se sitúan en el municipio de Teruel. La cifra resultante, tras restar esos 104 bienes que tienen estas diferentes casuística, es de 1.954.
Por diócesis, en la de Barbastro-Monzón, de los 674 que según el listado del Gobierno central se inmatricularon entre 1998 y 2015, ocho tienen otros titulares, tres han sido adquiridos por otras vías, uno se inmatriculó en otro momento y uno más está duplicado, resultado al final los 661 señalados.
Le sigue en número la Diócesis de Teruel y Albarracín, con 498 en el listado del Ejecutivo, de los que en 12 faltan datos para poder ser identificados; ocho no están inmatriculados; cuatro están duplicados; tres tiene otros errores; otros tres, otros titulares; dos son de comunidades religiosas; uno se adquirió por otra vía y otro se inmatriculó en otro periodo, quedando al final 464.
RESTO DE DIÓCESIS
De la Diócesis de Jaca constan 327 bienes, si bien en once de ellos la propiedad se obtuvo por una vía distinta, cinco tienen otros titulares y uno se inmatriculó en otro momento, resultando la cifra final de 310. En el caso de la Diócesis de Huesca, figuran 302, pero seis se inmatricularon en otro periodo, quedando 296.
La Diócesis de Tarazona aparecen en el listado inicial con 244 bienes, pero 34 fueron inmatriculados en un periodo diferente, sumando al final 210, mientras que de la Archidiócesis de Zaragoza se contemplan 13 y en los 13 la Iglesia ha confirmado que fueron inmatriculados entre 1998 y 2015.
El documento elaborado por la Conferencia Episcopal Española desgranada cada una de las diversas casuísticas de esos 104 bienes sobre los que en Aragón se ha detectando alguna incidencia.
REGULARIZACIONES
Desde la Oficina de Comunicación de la Iglesia en Aragón han subrayado que se ha realizado un trabajo «ímprobo» para que ese listado se corresponda con la realidad. «La Iglesia no quiere que esté a su nombre nada que no sea suyo» y, ahora, tras comunicar al Gobierno su estudio, se realizarán los ajustes y regularizaciones que sean necesarias.
Este informe de la CEE parte del estudio publicado el año pasado en el que el Gobierno de España señaló que las inmatriculaciones de la Iglesia han seguido la legalidad vigente.
Se trata de un conjunto de cerca de 35.000 inmuebles, cifra que va en consonancia con el tamaño y la naturaleza de esta institución, que cuenta con casi 40.000 entidades en España, han apuntado las citadas fuentes, que han resaltado que son bienes al servicio del bien común a través de las actividades propias de la comunidad cristiana y que ayudan a construir una sociedad «más humana, justa y fraterna».