Las consecuencias de consumir carne en mal estado pueden resultar devastadoras para la salud y casos como la salmonelosis y otro tipo de intoxicaciones alimentarias están a la orden del día. De todos los productos que consumes a diario, los más delicados son las carnes crudas, y de hecho, cocidas, ya que estas también pueden contaminarse y causar enfermedades.
Para que conozcas a detalle si una carne esta mala, acompáñame hasta el final; te aseguro que la información que tendrás te será de gran ayuda.
1Cadena de frío y correcta manipulación como factores determinantes de la calidad de la carne
En un mercado, siempre debes fijarte de la calidad y frescura de la carne; y si se trata de alimentos congelados aún más. Con frecuencia, los congelados suelen sufrir alteraciones en la cadena de conservación, y esto lo notas apenas lo tomas entre tus manos.
Si notas que la carne congelada luce ‘escarchada’ o con unas partes más pálidas que otras, es posible que en algún punto de su conservación, se haya descongelado y vuelto a congelar. Sin dudas, esto es una señal de cuidado, así que mejor evita adquirirla.
La manipulación de este alimento es tan delicada, que la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan), ha tenido que retirar varios productos cárnicos de la venta, por estar relacionados con brotes de intoxicación alimentaria, salmonella y listeria.