A todos nos gusta una rica comida con sabor y gusto, pero, ¿qué sucede cuando nos pasamos con la sal? Históricamente, el ser humano siempre ha buscado la forma de dar sabor o potenciar la sazón de los alimentos, y esto ha llevado a la utilización de la sal como ingrediente fundamental para lograrlo.
No obstante, aun cuando es utilizada para dar sabor y también para contribuir al proceso de conservación de los alimentos, este mineral puede llegar a ser perjudicial para la salud. Te invito a conocer cómo puedes disminuir su ingesta y también a descubrir el ingrediente sustituto que hará posible que no la extrañes en tu dieta.
3Más vale prevenir
Cuando se conocen los riesgos asociados al consumo excesivo de sal, lo mejor es buscar por todos los medios disminuir la cantidad diaria que ingieres.
Lograrlo es más sencillo de lo que crees, y todo pasa por reeducar al paladar para descubrir nuevos sabores que antes pasaban desapercibidos. Según afirma la Organización Mundial de la Salud, con tan solo disminuir el consumo de sal a 2.3 gramos/día, se lograría prevenir 1 de cada 4 ataques cardiacos.