Dulce, suave, esponjoso y con un aroma cítrico envolvente, así es el bizcocho de naranja. Y estas características lo han llegado a convertir en el postre perfecto para cualquier ocasión. Un buen bizcocho puede ser degustado a cualquier hora del día, pues, combina de manera perfecta con una taza de café o vaso de leche para desayunar, o bien que cae como una merienda ligera de media tarde.
Para hacer este dulce esponjoso y delicioso no hace falta ser un maestro repostero; incluso, con esta receta que hoy te propongo, podrás comprobar como cualquier dummie puede hacerlo.
7Hornea el bizcocho de naranja
Una vez tengas la mezcla lista y el molde preparado, enciende el horno a 180° C con calor arriba y abajo. Mientras se calienta, vierte la mezcla en el molde y dale suaves golpecitos para que la masa expulse el aire.
Una vez que el horno haya llegado a la temperatura ideal, introduce el molde para la cocción del bizcocho. Si mientras avanza la cocción observas que se está dorando demasiado la superficie, coloca un pedazo de papel de aluminio sin apretar para evitar que se queme.