Uno de los platos de pescado más tradicionales, divinos y fáciles de preparar es la lubina a la sal. Con muy pocos ingredientes, pero de gran calidad, es posible disfrutar de uno de los platillos más representativos de la gastronomía. Ahora bien, si hay algo que puede poner nervioso a un principiante con esta técnica de cocción, es saber en qué momento está en su punto el pescado.
Si eres de los que se siente ansioso pensando cómo lograr una lubina a la sal cocida en su punto y deliciosa, tienes que quedarte a conocer todo lo que estoy por compartirte.
3Elige la frescura como garantía de calidad final
La lubina a la sal básicamente requiere de la utilización de dos ingredientes: el pescado y la sal. Por esta razón, sería muy lamentable que por adquirir un pescado de poca frescura, termines con un sabor que no sea el esperado.
Un buen pescado fresco te ‘hablará’ con los ojos, pues, si tiene muchos días en el mostrador de la pescadería, estos lucirán secos y hundidos. Por el contrario, cuando está en su mejor momento, los ojos se verán húmedos, abultados y muy brillantes. Escógelos fijándote muy bien en este sencillo aspecto y aprende también a reconocer cuándo ha estado congelado por mucho tiempo.
