La demanda global de carga aérea creció un 3,7% en noviembre con respecto al mismo mes de 2019, lastrada por las interrupciones en la cadena de suministro, según datos de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA).
En concreto, las interrupciones en la cadena de suministro están ralentizando el crecimiento debido a factores como la escasez de mano de obra, debida en parte a que los empleados están en cuarentena, a la insuficiencia de espacio de almacenamiento en algunos aeropuertos y a los retrasos en los trámites, agravados por las prisas de fin de año.
Además, la capacidad de carga estuvo un 7,6% por debajo de noviembre de 2019, con lo que se mantiene relativamente sin cambios desde octubre, ya que sigue estando restringida debido a cuellos de botella en centros clave.
El director general de IATA, Willie Walsh, ha lamentado que todos los indicadores económicos apuntaban a que la demanda seguía siendo fuerte, pero «las presiones de la escasez de mano de obra y las limitaciones en todo el sistema logístico provocaron inesperadamente la pérdida de oportunidades de crecimiento».
Por ello, ha solicitado a los gobiernos que actúen con rapidez para aliviar la presión sobre las cadenas de suministro mundiales antes de que esto afecte permanentemente a la forma de la recuperación económica de la Covid-19.
Por regiones, las aerolíneas norteamericanas aumentaron un 11,4% la demanda de carga aérea internacional en octubre en comparación con el mismo periodo de 2019. Las compañías aéreas de Oriente Medio registraron un crecimiento del 3,4%, mientras que la demanda de las aerolíneas europeas subió apenas un 0,3%.
Además, las aerolíneas de Asia-Pacífico informaron de un aumento del 5,2%, mientras que las latinoamericanas registraron el único descenso de todas las regiones, con un 13,6% menos.