La Comisión de Salud Pública no recomienda cribados masivos en los centros educativos

La Comisión de Salud Pública del Consejo Interterritorial de Salud no recomienda cribados masivos en los centros educativos en ningún escenario, pero propone valorar «en última instancia» el cierre «temporal» de un centro si se produce una «transmisión no controlada».

Así lo recoge la adaptación de la guía de actuación ante la aparición de casos de Covid-19 en centros escolares en un contexto de alta circulación, que fue acordada el pasado viernes por Sanidad y las comunidades autónomas de cara a la vuelta a las aulas de más de 8 millones de niños este lunes, 10 de enero, tras las vacaciones de Navidad –salvo País Vasco, donde volvieron el viernes–.

El documento recoge las medidas impulsadas de acuerdo al actual contexto de «incremento acelerado» de las transmisión comunitaria de la enfermedad en España y teniendo en cuenta la «prioridad» de mantener la presencialidad en las aulas, que constituyen «entornos seguros» de forma «general».

Aunque Sanidad dio a conocer el viernes los principales cambios en el protocolo, que afectan a las cuarentenas, quedaba pendiente la actualización de la guía con los mencionados cambios, que tiene fecha de 8 de enero.

Así, en la guía se explica que en caso de sospecha o confirmación de casos, quienes presenten síntomas respiratorios compatibles con la Covid-19 no deberán acudir al centro hasta que obtengan el resultado de una prueba o, en caso de que no haya la posibilidad de hacer un test, hasta que finalice el aislamiento mínimo de siete días y cuando hayan transcurrido tres días desde el fin del cuadro clínico.

Además, tras el período de aislamiento y hasta diez días posteriores al inicio de síntomas o fecha de diagnóstico en casos asintomáticos, las personas positivas tendrán que «extremar» las precauciones y reducir las interacciones sociales, especialmente en el contacto con personas vulnerables, y siempre usando la mascarilla.

Además, según indica el documento, se podrá realizar una prueba PCR en muestras de saliva como alternativa de elección a la toma de muestra nasofaríngea en casos en los que a determinadas personas no se les pueda tomar ese tipo de muestra.

CIERRE DE AULA

Solo se aplicarán medidas dirigidas al cierre de un aula si hay al menos un grupo de cinco o más casos confirmados en la misma o un 20 por ciento de los alumnos contagiados, recoge el documento.

Asimismo, indica que en esta posible situación en una clase también se mantiene el aislamiento general de siete días en casos confirmados leves, o de 21 en graves o personas con inmunosupresión, en todos los niveles educativos y respecto al profesorado y personal del centro. En este caso se realizará prueba únicamente a los contactos estrechos vulnerables o que vivan en entornos vulnerables.

Por el contrario, ante la aparición de un primer caso en un aula y hasta un total de cuatro o afectación de al menos el 20% del estudiantado en un período igual o inferior a siete días, los alumnos de los niveles de infantil y primaria no realizarán cuarentena, a excepción de las personas con inmunosupresión.

Mientras, el profesorado, otro personal del centro y la población de doce años y más tendrán que cumplir la cuarentena general de siete días en contagios confirmados leves y de 21 en personas con enfermedad grave o inmunosupresión.

Además, solo se realizará una prueba a los contactos estrechos vulnerables o que vivan en entornos vulnerables, mientras los responsables Covid-19 de cada centro tendrá que informar a la comunidad educativa correspondiente la situación y recomendar extremar las precauciones.

En «ninguno de los escenarios» contemplados se recomienda en la actualidad llevar a cabo cribados masivos en los centro escolares, a no ser que «de forma excepcional» lo indiquen así las autoridades sanitarias públicas.

Si la situación fuese de transmisión no controlada en un centro, las medidas marcan que los servicios de salud pública de las comunidades deberán desarrollar una «evaluación del riesgo» para decidir si escalar medidas, «valorando en última instancia» el cierre «temporal» del centro educativo en cuestión.

Todos estos criterios se aplicarán, además, a todas las actividades extraescolares que se lleven a cabo en los centros educativos.