¿Quién no ama comer unas papas fritas? Las papas fritas se han colado en el corazón de todo el mundo y ya no solo se les disfruta cuando acompañan una hamburguesa, un sandwich o un tradicional cachopo; sino que también, se han convertido en una merienda frecuente para los niños y para los adultos mientras se disfruta de una película tranquilamente. Para muchos, lo único malo que tienen estas patatas, es que, al ser fritas, contienen mucha grasa. Sin embargo, ¿sabías que puedes hacerlas con una textura y sabor auténtico, pero sin aceite?
6Comienza por las papas
Lo primero que debes hacer cuando quieres preparar papas fritas es escoger unas que sean de tamaño parecido y que no tengan huequitos ni magulladuras. Escoge aquellas de piel entera y consistencia firme.
Retírales la piel y córtalas en bastones tal como si se tratara de unas patatas a la francesa tradicionales. Procura que queden del mismo tamaño, así la cocción se hará de forma pareja y quedarán perfectas y crujientes por igual.