Muy pocas personas saben que el aguacate es una fruta y no una verdura. Esto es así dado que nace de una semilla y no crece de una parte de la propia planta, como ocurre en el caso de las verduras. Al margen de la curiosidad, una cosa está clara: los aguacates son un alimento cuya popularidad está en auge.
Sus peculiares características han hecho que su consumo haya crecido en todo el planeta. Tan sólo el mercado europeo necesita un suministro de entre 5.000 y 5.500 toneladas semanales. España es el mayor productor del continente, gracias a su cultivo en el Sur y Canarias. A nivel mundial, la demanda ha llegado a un punto que está generando problemas medioambientales. Es el caso de México, donde se está manifestando esta situación con especial virulencia. Al ser un cultivo altamente rentable, muchos agricultores están destruyendo la selva para tener más tierras en que sembrarlos, con todas las consecuencias que estos desastres naturales conllevan. Hoy no vamos a incidir en esto, sino que nos vamos a ocupar de explicarte por qué quizá no te convenga o no te siente bien comer aguacate.
5El aguacate y la alergia al látex
En la introducción hemos mencionado que hay personas a las que no les conviene comer aguacate. Uno de estos grupos de individuos son los alérgicos al látex. Las razones residen en que la alergia al látex y al aguacate están altamente asociadas. Por tanto, es muy probable que si sufres la primera, te ocurra lo mismo con la segunda, al contener ambos elementos alérgenos comunes. Esta coincidencia se da hasta en un 60% de alérgicos al látex. Estos no sólo deberán prestar especial atención al aguacate, sino que podrían tener una reacción cruzada con otros frutos, verbigracia, el plátano, el kiwi, la nuez, etc.
