Baleares cierra 2021 con una coexistencia de variantes «a niveles muy altos»

Baleares cierra este 2021 con una coexistencia de las dos variantes predominantes –Delta y Ómicron– «a niveles muy altos», ya que mientras la última avanza cada vez más, la primera sigue resistiéndose a desaparecer.

Así se ha expresado este viernes en declaraciones el jefe del Servicio de Microbiología del Hospital Son Espases, el doctor Antonio Oliver, quien ha señalado que «no se ha observado ningún cambio espectacular» en el número de casos desde el lunes hasta ahora, por lo que la cifra de contagios se podría decir que se mantiene estable, aunque alta.

«Empezamos la semana con 1.000 positivos diarios –detectados en el hospital– y hasta el jueves seguíamos en esa misma cifra», de los cuales entre un 50 y un 60 por ciento se corresponden con la variante Ómicron y entre un 40 y un 50, con la Delta.

«El porcentaje de Ómicron ha ido subiendo a lo largo de la semana, mientras que la variante Delta se está resistiendo», es decir, «no está bajando rápidamente», ha explicado. Con todo, ha señalado que gran parte de los ingresos en las Islas se deben a la Delta.

CONSECUENCIAS DE LA NAVIDAD

Preguntado por si se han empezado a observar los efectos de las fiestas en cuanto al número de contagios, el doctor ha indicado que, efectivamente, «los positivos de ahora están muy influenciados por Navidad».

«Desde el lunes hasta el jueves, de los 3.000 o 4.000 positivos que se han detectado, gran parte de ellos son consecuencia de Navidad», ha insistido.

Asimismo, la previsión para enero es que se mantenga una tendencia al alza. Por estas fechas «de alto contacto social, por ser Nochevieja y Reyes, quedan, como mínimo, dos semanas de subida seguro, no antes», ha advertido.

No obstante, sobre este alza de contagios, Oliver ha señalado que se puede observar un impacto contrario en los números, ya que ahora «no es necesario confirmar el resultado de los test de antígenos de farmacias».

«Esto previsiblemente va a disminuir la actividad de la PCR, se darán menos diagnósticos pero no significa que haya menos casos, sino que se dan por buenos los antígenos», ha concluido.