Donar sangre es una acción no solo solidaria, también importante y necesaria para atender a pacientes de riesgos. La donación funciona para atender casos críticos, pacientes que requieran tras intervención quirúrgica entre otros casos.
El que una persona decida donar sangre contribuye a los centros y a los pacientes recluidos que requieren de este para superar ciertas condiciones. Es evidente que una sola persona no puede cumplir con las bolsas de un centro, pero ayuda a recolectar hasta llegar a las necesarias de acuerdo a cada paciente que lo requiera.
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Por lo general, el consumo medio de sangre depende del tamaño del centro hospitalario. Se estima que en los centros de España, el consumo sea de al menos 80 bolsas de sangre por día.
Las bolsas recolectadas tras las personas que deciden donar sangre, se destinan principalmente a tratamiento oncológicos. Al menos la mitad de las bolsas son destinadas a ello, así como también se utiliza para intervenciones quirúrgicas, tratamientos crónicos.
La donación también se destina a casos de anemias y partos, pero en estos últimos casos , suelen ser en menor medida respecto de las anteriores.
10Culminación del proceso de donación
Tras finalizar la extracción de sangre, se recomienda a todos los donantes reposar. También se recomienda reponer líquidos inmediatamente y evitar el consumo de tabaco y alcohol.
Es aconsejable que el donante acuda con un acompañante, puesto que tras el proceso no es conveniente conducir vehículos pesados. No es recomendable hacer ejercicio intenso ni exponerse a altas temperaturas.
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