La panna cotta es un postre Italiano de principios del siglo XX y surgió cuando la leche y sus derivados como la nata o la crema eran abundantes. Los orígenes de este divino postre lo retratan como una receta de aprovechamiento, ya que solía elaborarse con la nata sobrante de otras preparaciones.
Su nombre significa crema cocida y se caracteriza por ser de textura suave, dulce y aromática. Para darle un toque aromático y mágico adicional, a la panna cotta suele añadírsele diferentes ingredientes, que van desde ron, café, cáscaras de limón o canela y suele servirse bañada en una salsa de frutas o un cremoso chocolate. Para que te deleites con este dulce postre italiano, te contaré todo lo que necesitas saber para hacer la mejor panna cotta del mundo.
6Lleva a la nevera para que tome la consistencia y temperatura perfecta
Cuando la mezcla esté aireada, sírvela en porciones individuales. Puedes hacerlo en copas, moldes de cupcakes o en platos hondos de postre. Una vez servida, déjala reposar por unos minutos, hasta que se encuentre a temperatura ambiente.
Lleva los postres a la nevera una vez estén a temperatura ambiente y déjalos en la misma por un tiempo entre 3 y 4 horas para que tome consistencia.