La tortilla de patatas es el plato favorito de un número enorme de los españoles. En verano, sin embargo, hay que extremar la precaución con su conservación, ya que podemos acabar contagiándonos de salmonelosis. Si quieres recalentarla tras sacarla de la nevera, sin embargo, correrás el riesgo de que se quede reseca.
Como los verdaderos amantes de la tortilla no están dispuestos a comerse una tortilla seca, hoy te vamos a contar algunos consejos para que no pierda sabor ni jugosidad si tienes que calentarla de nuevo en el microondas.
6FORMAS DE RECALENTARLA SIN MICROONDAS
A la hora de calentar tu tortilla de patatas tienes dos opciones principales: el microondas o la sartén. En ambos casos has de poner un poco de aceite a tu tortilla y darle la vuelta a los treinta segundos. No hace falta que la tortilla esté caliente, solo necesitas que vuelva a ponerse jugosa y pierda el helor de la nevera.
Otra buena manera de recalentarla es usando el horno, aunque gastaremos un poco más al hacerlo. Tapala, para que no se reseque, eso sí. La última opción sería con vapor: poniendo un cazo con agua hirviendo y encima el plato de tortilla de patatas con la tapa de la cacerola. Con unos minutos de ebullición será suficiente.
Con estos trucos estamos seguros de que no volverás a probar una desagradable tortilla reseca, de esas que te entran ganas de dársela a tu mascota. Y es que, con un recalentado de sobra, haremos que se reseque tanto la patata como el huevo de los huecos, provocando que lo que antes había sido un platazo se convierta en una pasta incomible.