En navidad son muchas las familias que se reúnen en torno a la mesa mientras se rememoran viejos recuerdos, y se disfruta de los sabores de aquellas recetas preparadas por las abuelas. La sopa de marisco es una de ellas, y cuando se prepara con un rico gusto, no hace más que recordar toda la tradición que gira en torno a ella.
Esta receta ha pasado de generación en generación y se ha convertido en toda una tradición; al punto, de para muchos ser imposible imaginar una Navidad sin el rico sabor de la sopa de marisco tradicional.
2Selecciona los mariscos
Al momento de comprar las gambas frescas, estas deben tener los ojos negros, la piel gris, pero brillante y no deben tener forma curva; es decir, deben lucir rectas y no presentar ningún olor molesto. Cuando las gambas están realmente frescas, esta tienen un profundo olor a mar.
En el caso de las almejas y mejillones, cuando vayas a comprarlos deben estar fríos. Así mismo, si notas que el caparazón está abierto, presiónalo suavemente para que se cierre; si no se cierra descártalo, pues es señal de que está muerto. También debes estar muy atento a los olores, ya que no deben tener ningún tipo de olor extraño. En caso de oler mal, esto puede significar que los mejillones están descompuestos.