Después de una deliciosa comida, todos en la mesa suelen esperar con ansias el momento de recibir el rico postre que terminará de cerrar con broche de oro la celebración. Por lo general, en la cena de Navidad, las expectativas crecen, y el dulce secreto para dar el gusto al paladar, se convierte en todo un acontecimiento. Te invito a deleitar a todos con un dulce mousse de café. Una propuesta dulce y sencilla que te encantará.
El nombre de mousse, viene del francés, y este hace alarde precisamente de la textura ultraligera y esponjosa de este; que si bien, puede disfrutarse tanto dulce como en elaboraciones saladas, es como postre que definitivamente se luce.
9Monta las claras y la nata por separado
En un bol coloca las claras de los tres huevos y agrega 40 gramos de azúcar. Bátelas hasta que se encuentre en punto de nieve y reserva.
De la misma forma, pero en otro recipiente, con la ayuda de un batidor eléctrico, monta 100 gramos de nata junto a 40 gramos de azúcar.